Creo que estoy perdiendo la audición
Darnos cuenta que escuchamos menos o sospecharlo es el primer paso para mejorar. La reducción de la sensibilidad auditiva o hipoacusia se origina por el debilitamiento lento y progresivo del sistema auditivo, pudiendo afectar a uno o ambos oídos.
Empezamos por no entender algunas palabras o notar que los sonidos no los persibimos como antes… Puede pasar a cualquier edad, la causa mas probable es por el envejecimiento sin duda, pero igual puede suceder en jovenes por escuchar música a alto volumen o por una otitis (infección en el canal auditivo).
En México más de 12 millones de personas tienen algún tipo de pérdida auditiva. Solo un pequeño porcentaje ha hecho algo para solucionar el problema.
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Oído sano, cerebro funcionando al 100%
Oír bien es necesario para que el cerebro funcione adecuadamente. La reducción de la sensibilidad auditiva afecta a la capacidad de procesar y recordar información, causando otras alteraciones cognitivas al cambiar la forma de asignar recursos al proceso de escucha, tomándolos de otras funciones. Esto puede potenciar la demencia precoz.
¿Por qué ocurre la pérdida auditiva?
Estos son las causas más probables:
Envejecimiento natural: afecta a más del 40% de los mayores de 50 años, y supera el 90% en mayores de 70.
Factores hereditarios: los hijos lo heredan de sus padres o abuelos.
Infecciones: como la escarlatina, el sarampión o la meningitis. Pueden dañar el oído y provocar un déficit auditivo más o menos grave. La otitis mal curada también puede causar pérdida de oído.
Trauma acústico: los ruidos muy fuertes pueden dañar la delicada estructura interna del oído.
Uso de Medicamentos y otras sustancias como fármacos, alcohol y tabaco también pueden ser nocivos.
Diabetes e hipertensión: aumenta en un 200% las probabilidades de desarrollar hipoacusia.
Conoce los síntomas de la hipoacusia
Escuchar es importante para tener una buena calidad de vida, no escuchar bien nos hace sentir aislados de nuestro entorno, sin poder disfrutar de algunas cosas que llenan de felicidad nuestro día como una platica con amigos o en el trabajo, disfrutar de tu canción favorita o simplemente escuchar los sonidos de la naturaleza. El sonido nos ayuda a interactuar con nuestro entorno tanto para socializar y comunicarnos, como para sobrevivir: si no oímos el claxon de un coche, puede que tengamos un accidente. Por todo ello, es necesario que conozcas los principales síntomas de la hipoacusia.
Dificultad para escuchar algunos sonidos.
Dificultad para entender palabras y seguir conversaciones en diferentes ambientes.
Pedir a los demás que hablen más despacio, claro o en voz más alta.
Subir demasiado el volumen de la televisión.
Que tus amigos o familia te digan que no escuchas bien.
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